Una rutas para barcos en San Antonio poco frecuentada, pero indudablemente preciosa e inolvidable es la costa Norte de Ibiza. Saliendo desde San Antonio, vamos a repasar sus mejores sitios.

La costa norte ibicenca es escarpada y abrupta. Sin embargo, tiene un halo de tranquilidad y relajación que dificilmente se encuentran en otras zonas más frecuentadas de las Pitiusas. Los acantilados que la decoran, de vivos tonos verdes y ocres, la convierten en un paraje donde se puede respirar la verdadera esencia de Ibiza.
Al salir del puerto de San Antonio, pondremos rumbo norte. Las primeras playas que nos encontraremos serán Es Caló des Moro, Cala Gracio y Cala Salada. Esta última merece sin duda una parada para poder disfrutar de sus dos partes, Cala Salada y Cala Saladeta.

Ambas playas hermanas disfrutan de unas aguas de hermosos colores turquesa. Entre ambas, se extiende una explanada de piedra desde la que poder saltar al mar desde diferentes alturas.
Siguiendo nuestra ruta, y después de pasar entre la costa y la Illeta de Cala Salada, pondremos rumbo Norte hasta alcanzar el impresionante Cap Nonó, y una vez pasado, nos dirigiremos hacia los islotes Ses Margalides, cuya foto es portada de este post. Como habréis podido imaginar, su principal atractivo es el arco de piedra natural que se forma en el mayor de los islotes y que podremos atravesar por debajo con barcos de hasta 10 metros. Es una experiencia inolvidable para todo aquel que lo haya probado.

Siguiendo la costa, podremos deleitarnos con unas vistas espectaculares de los acantilados que decoran nuestra ruta. Justo en frente de Ses Margalides, nos encontraremos con Ses Torretes, que también forman un pintoresco arco de roca natural y que, con una embarcación de tamaño medio, podremos cruzar por debajo.

En pocos minutos, llegaremos a Cala Aubarca. Es una cala de grandes dimensiones, cuyas paredes de piedra pueden llegar a alcanzar los 300 metros de altitud, lo que proporciona unas fastuosas panorámicas. Más o menos en el centro de la cala, cerca de la Illeta de Cala Aubarca, podremos encontrar aguas lo suficientemente poco profundas para fondear sin peligro.

Siguiendo la costa en dirección Este, nos encontraremos con nuestra recomendación secreta de la ruta. Es una calita muy poco conocida, pues su ubicación por mar es dificil de encontrar a menos que se conozca y por tierra suele ir poca gente dado que está en un emplazamiento de complicado acceso. Se trata de Es Portitxol.

Como hemos comentado, su ubicación por mar es dificil de encontrar. Nada más alcanzar el Cap des Rubió hay que virar a estribor y seguir la costa para entrar en la pequeña bocana de la cala que hay entre ese cabo y el Cap de sa Galera. Es fácil pasar de largo, pues desde cierta distancia, la bocana pasa desapercibida. Sin embargo, de encontrarlo, el lugar se convertirá sin duda en uno de nuestros favoritos, no solo ya de la ruta, si no de prácticamente toda la isla. La forma casi perfectamente circular de la cala y las casetas varadero que la decoran le dan al lugar un encanto mágico.
Sigueindo nuestra ruta, pasaremos por Na Xamena y tras pasar por Sa Punta de sa Creu llegaremos al Port de San Miquel.

Es una de las calas más conocidas del norte de la isla. Quizás peca de estar demasiado urbanizada, en contraposición con el resto de la zona, sin embargo, dentro de la misma cala podremos econtrar sitios tranquilos para fondear como Sa Cala des Multons, o Cala de sa Ferradura, cerca de la península artificial en el que se ubica una espectacular mansión.
La cala cuenta con el restaurante Port Balansat, en el que podremos degustar uno de los mejores Bullits de Peix de la isla.
La cala vecina en la que finalizaremos nuestra ruta es la mítica Benirrás.

Muy conocida por ser un punto de encuentro habitual en la comunidad hippie ibicenca, tiene como uno de sus principales reclamos su particular fiesta de los tambores, que tiene lugar ahí todas las tardes de domingo. Cientos de personas se reunen para contemplar una de las más espléndidas puestas de sol de la isla al son de los mágicos ritmos de los tambores.

La verdad es que Cala Salada es una de mis lugares preferidos de Ibiza. Os lo recomiendo sin duda. Pablo
Gracias Pablo. Es un lugar precioso.